-Cada minuto mueren sesenta segundos en este país.
-Sí, sesenta.
-Sí, sesenta.
-Y las cifras son notablemente similares en el resto del mundo.
-Nadie parece tomarse demasiado en serio esta catástrofe humanitaria.
-La Comunidad Europea sólo aplica parches vanos. En otoño atrasan los relojes una hora, pero seis meses más tarde parecen comprender lo inútil de la medida y vuelven a adelantar esa hora.
-En el reciente debate electoral, por ejemplo, no ha habido ni una sola mención al trágico tema de la mortandad de los segundos.
-Es más, en ninguno de los programas electorales de los partidos políticos del mundo se tiene en cuenta este drama.
-Tan sólo alguna organización no gubernamental, como Save the Seconds, lucha por paliar esta debacle de los segundos.
-Es inadmisible que en vez de apoyar las campañas de esta ONG, se la critique por exhibir crudamente los cadáveres de los segundos muertos.
-Es inadmisible que en vez de apoyar las campañas de esta ONG, se la critique por exhibir crudamente los cadáveres de los segundos muertos.
-Lo cierto es que sesenta segundos siguen muriendo cada minuto de cada día, y no somos capaces de hacer nada.
-No esperemos ni un segundo más.
-Para mañana hay convocada una concentración frente al reloj de la Puerta del Sol de Madrid para despertar la consciencia de la gente ante esta matanza. Es a las siete de la tarde.
-Se ruega puntualidad.
Para mí, siete segundos...
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=KYN4kmrHoHk
(Y gracias,otra vez...)
"save the seconds". me lo tatúo en la muñeca, sustituyendo al reloj, un instrumento que solo mata las horas.
ResponderEliminarJoder, qué bueno, estimado. He tardado en leer tu entrada 40 segundos, pero el reloj se ha parado por completo 'contando' en los minutos que quedan por descontar antes del final del partido.
ResponderEliminarBuenísimo. No faltaré a la mani.
Yo voy. Estaré con los segundos entre los primeros
ResponderEliminarUn beso, BLANCO
¡¡¡Apadrina un segundo!!!...
ResponderEliminarQué buena entrada. Me encantó la forma de narrar.
Me quedo, también me gustan los guiones y, lo que más, los puntos suspensivos; esos me pierden.
Un abrazo de una recién llegada.
Hace frío fuera ¿hay café caliente?
En la manifestación de mañana estaré el primero defendiendo los segundos y llevaré una pancarta bien grande de Save the Seconds.
ResponderEliminarno les auguro un futuro mejor, me temo.
ResponderEliminarbuenísimo, oye.
Tú rogando puntualidad
ResponderEliminarYo, llegando tarde...
Besicos.
Si algo me duele, por ejemplo…, es perder la puntualidad, por ejemplo…, contigo.
ResponderEliminarBlanco, Un fuerte abrazo. Maestro.
Mucho peor es perder las orejas, esas de sesenta minutejos.
ResponderEliminarHola,preciosas letras van desnudando lentamente la pura e integral belleza de este blog, si te va la palabra elegida, la poesía, te invito al mio,será un placer,es,
ResponderEliminarhttp://ligerodeequipaje1875.blogspot.com/
gracias, buen día, besos truhanes...
El tiempo trabaja más que una colmena. Nunca se está quieto y siempre, siempre, hace su trabajo.
ResponderEliminarNi siquiera tu talento podrá salvar a esos pobres segundos. Ríndete y envejece con resignación.
Un abrazo.
La mejor manera de perder el tiempo es mirar el reloj. Cuando levantas la vista, ya pasó la vida.
ResponderEliminarPara venir aquí,Blanco, mejor no medir los segundos. Un placer leerte. Besos.
Piragata.
Tú, tu blog, siempre lleno de consciencia y de conciencia: No nos queda mas remedio que invertir nuestro tiempo en vivir, ver morir los minutos, las horas y los días... para vivir. Perdiendo el tiempo, derrochándolo sin saber cuanto nos queda, sin imaginar si estamos en números rojos ya o la cuenta corriente seguirá cronometrando la carrera del reloj hasta que se detenga en la supuesta eternidad.
ResponderEliminarAl político solo le importa el tiempo cuando está en la oposición, hasta un día como hoy, después se instala en el poder y se tumba a la bartola durante 4 años. Mientras gobierna, el tiempo de los ciudadanos le importa tres cojones y legislan nuevos recortes; la jubilación a los 67 años: el sistema se apropia de tu vida y de tu tiempo, te organiza cada minuto de tu vida y de tu tiempo.
Yo le prometí a ella que hoy iría a votar y en eso,hoy, perderé mi tiempo.
Gracias por tu comentario y por estás cosas.
ABRAZOS
Bienaventurados los segundos, porque ellos serán los primeros.
ResponderEliminarMe ha parecido fantástico. Genial
ResponderEliminarY la gente empeñada en matar el tiempo sin ser consciente de que no lo pueden resucitar
ResponderEliminar¡Gracias, gracias, gracias!
ResponderEliminar¡Perdón, perdón, perdón!
¡Tiempo, tiempo, tiempo!